El piloto alemán Sandro Cortese, campeón mundial de Moto3 en 2012, protagonizó el debut soñado en el Mundial de Supersport al conseguir el título con el equipo Kallio Racing en su primera temporada.
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Cortese, pilotando una Yamaha YZF-R6, se aseguró este sábado el título gracias a su segundo puesto en la última prueba de la temporada, disputada en el circuito catarí de Losail, y sucedió en el historial de campeones al francés Lucas Mahias.
Incorporado en el último momento al campeonato, consiguió en el Motorland de Aragón su primera victoria, que le situó ya segundo en la general, a solo cuatro puntos del líder Mahias.
Su habilidad lo ha convertido en estrella
A continuación fue sexto en Assen y cuarto en Imola, antes de obtener un nuevo triunfo en Donington Park. En su retorno a la pista británica por primera vez desde 2009 -cuando competía en 125cc- Cortese batalló con Jules Cluzel, a esas alturas su gran rival por el título, y se impuso con 1.3 segundos de ventaja sobre el francés.
Cortese ascendió al liderato del Mundial, con una ventaja de siete puntos. Luego fue segundo en Brno (R.Checa) y tercero en Misano (Italia), antes de la interrupción veraniega.
Tras el parón, en Portugal, el piloto alemán fue quinto después de sufrir una caída y remontar desde el 15. Después fue segundo en Nevers Magny-Cours (Francia).
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La victoria de Cluzen en Argentina aplazó la resolución del Mundial hasta Catar, donde Cortese, segundo tras Lucas Mahias, se ha proclamado campeón mundial.
Cortese es el segundo alemán que conquista el título de WorldSSP, siguiendo los pasos de Jorg Teuchert, que lo ganó en el 2000, y se convierte en el primer piloto de la historia que ha sido campeón mundial en Moto3 y Supersport.
